Review about Andy Green, Tom Leney and Alison Wolf: Convergences and divergences in European systems of education and vocational training

Abstract

Título: CONVERGENCIAS Y DIVERGENCIAS EN LOS SISTEMAS EUROPEOS DE EDUCACIÓN Y FORMACIÓN PROFESIONAL

Autores: ANDY GREEN, TOM LENEY Y ALISON WOLF

Editorial: Ediciones Pomares

ISBN: 9788487682407

Barcelona, 2001.

Una preocupación de las ciencias sociales es saber en qué medida las sociedades convergen entre sí. El asunto no es menor en la Unión Europea, dada la importancia que esta convergencia tiene en el despliegue de su política supranacional por todo el continente europeo.

Un tema del que desconocemos mucho y se ha escrito muy poco. Pues bien, este libro pretende cubrir este hueco, contribuir a la comprensión de las tendencias educativas que se están dando en Europa, tanto en sus convergencias como divergencias. Aunque la investigación arranca a finales de los ochenta y se publica a comienzos de los noventa del siglo anterior, no ha perdido su vigencia dado que el libro habla de tendencias, de líneas básicas y no entra en detalles que con frecuencia no resisten el paso del tiempo. Pero veamos de qué nos hablan los autores.

Comienzan, en el primer capítulo, analizando las tendencias culturales en las sociedades nacionales europeas, a las que responsabilizan de las líneas de divergencia que sólidamente manifiestan los sistemas de educación y formación profesional, lo que permite a los autores explicar las causas de las diferencias educativas entre países en el gasto per capita, índices de participación o de cualificación, amén de diferencias estructurales. Tampoco olvida la historia, pues en la situación actual encuentra tres ámbitos en los que las diferencias históricas acumuladas juegan un importante papel a la hora de determinar las pautas que siguen los diferentes sistemas educativos, a saber: estructura económica, influencias geopolíticas y culturales, pues encuentra que hay una afinidad por regiones, esto es, unas características comunes según la zona donde esté situado el país- y la organización del mercado laboral. Por tanto, señalan en el primer capítulo las presiones que sufren los países europeos acerca de cómo educar a su población, dejando claro que dentro de una serie de presiones comunes se producen respuestas distintas y diferenciadas en las que la trayectoria histórica y cultural ha jugado y juega un importante papel.

El segundo capítulo está dedicado a la gobernación y regulación en los sistemas de educación y formación profesional. Aquí analizan las distintas formas de descentralización, ya sea mediante una dispersión de poderes entre distintos actores, como la cesión de poder a poderes intermedios como los regionales o autonómicos, la autonomía escolar o la autonomía mediante la introducción de relaciones competitivas entre las escuelas o una mayor capacidad de gestión de los consumidores, así como las políticas de selección y admisión de alumnos, sin olvidar la gobernación de los sistemas educativos en la Unión Europea.

El tercer capítulo está dedicado a la adquisición de competencias básicas, capítulo en el que se examina la permanente diversidad de estructuras en los diferentes países, estos es, los aspectos divergentes, pero al mismo tiempo señalan las tendencias convergentes, señalando como tales las siguientes: objetivos similares de política nacional, retraso en el momento de la especialización en itinerarios, oferta de un currículo amplio y equilibrado para todos, desarrollo de nuevas asignaturas como la incorporación de  los idiomas y la extensión de las tecnologías de la información, sin olvidar la habilidades como aprender a aprender y el comportamiento cívico, el agrupamiento de los jóvenes, los desafíos de la diversidad y el problema de la evaluación y la formación del profesorado. Estamos ante un capítulo que llama la atenció n sobre el contraste entre la diversidad de estructuras en la educación secundaria, pero que en definitiva sirve para ver, a pesar de las tendencias comunes, cuán lejos se está aún de una plena convergencia. Congruencia de objetivos, es verdad, pero diversidad de estructuras por mor de contextos económicos y sociales distintos, sin olvidar tradiciones educativas y políticas diversas.

El cuarto capítulo lleva por título Educación y formación profesional postobligatoria inicial.  Capítulo particularmente interesante en el que señalan la existencia de amplias tendencias comunes en la Unión Europea: descenso de los alumnos que al final de la secundaria obligatoria abandonan el sistema educativo, coincidencia en cursos postobligatorios más prolongados, evolución convergente aumentando los índices de participación y el tiempo medio pasado en la educación y en la formación profesional, descenso en las proporciones de alumnos que abandonan el sistema educativo, diversificación de itinerarios, reducción de la especialización temprana para consolidar una base de formación amplia y flexible que permita a los jóvenes su inserción laboral, mejora en el tránsito entre itinerarios y su conexión con la práctica, conjunción más estrecha entre educación y trabajo y demanda de cualificaciones más generales. Eso sí, persisten grandes diferencias en la forma que cada Estado organiza la educación y la formación profesional, donde unos países hacen hincapié en el aprendizaje y otros en la relación con las empresas, aunque parece que las fuerzas se mueven en una dirección: conciliar el aprendiza y con la formación en la empresa.

El capítulo quinto aborda la enseñanza superior y el aprendizaje permanente. Es decir, analizan la evolución de la educación superior y la formación profesional para adultos dentro de lo que se conoce como aprendizaje permanente. Lo primero que destacan es su enorme expansión en Europa, alcanzando una progresiva internacionalización a través de los programas Sócrates y Erasmus. No obstante, reconocen que es un campo del que se dispone de escasos datos, lo que exige realizar nuevos análisis y evaluaciones, aunque el asunto ofrece dificultades dadas la enorme variedad de enfoques que presentan los estados miembros. Y es un tema capital, pues la formación permanente es vital para combatir la exclusión. Una formación, y en esto sí que se observa una tendencia a la convergencia, que va estrechando la relación entre la formación continua y general, aunque sigue siendo un desafío la acreditación y titulación de los saberes aprendidos por estas vías.

El último capítulo viene a ser una especie de epílogo o recapitulación en el que abordan, haciendo honor al título del libro, una perspectiva general de las convergencias y divergencias en los sistemas de educación y formación profesional entre los estados de la Unión Europea. La postura de los autores es meridiana : de un lado defienden los diferentes contextos nacionales como base para una mejor convergencia o práctica común entre los estados miembros en el terreno educativo; y de otro, sobre esta base, abogan por una convergencia sobre el terreno firme de unos objetivos comunes, entre los que señalan los siguientes : aumento de la calidad y la eficiencia de la educación y la formación profesional, la eliminación de la marginación social y la exclusión, la intensificación de la solidaridad social y de la competitividad económica por medio de niveles más altos de conocimiento y adquisición de habilidades mediante el desarrollo de un aprendizaje permanente. Y todo para terminar reivindicando una sociedad europea culta e integrada.

El libro termina con un amplio anexo realizado por tres investigadores de la Universidad de Granada en el que exponen de manera detallada y suficiente la organización y estructura de todos los sistemas educativos de la Unión Europea, acompañado de un comentario de cada uno de sus niveles y completado con direcciones de páginas web con el fin de que el lector pueda ampliar la información sobre los mismos.

Dado que la idea de convergencia se encuentra en el corazón del proyecto europeo, el libro es una ventana abierta para observar la senda por la que discurre la educación, incluida la formación profesional, entre los estados europeos. Un proyecto supranacional que trata de conjugar la divergencia nacional nacida sobre trayectorias históricas y culturales singulares con la convergencia que exige el ambicioso y fascinante proyecto europeo.

ELÍAS RAMÍREZ AÍSA